He reunido algunos “hechos y acontecimientos
relevantes”, contenidos en las Memorias de Caja Madrid de los años 2008 y 2009,
es decir, en plena crisis financiera.
En la
carta de presentación de Informe anual 2008 Miguel Blesa, entonces Presidente de Caja
Madrid, decía textualmente: “En un año de
grandes pérdidas para muchos bancos en todo el mundo, Caja Madrid ganó 1.200
millones de euros antes de impuestos, lo que es sin duda uno de los mejores resultados
del panorama internacional”.
En el Informe anual de 2009, se contenían
afirmaciones como éstas: “nuestra gestión
se ha enfocado a dar fortaleza al balance, manteniendo una posición equilibrada
en el crecimiento del crédito y los recursos captados de clientes”… … “el crédito
se ha mantenido activo frente al retroceso generalizado del sector,
consiguiendo un histórico 6,9% de cuota de mercado.” O bien: “Convencidos de que nuestros clientes e
impositores son nuestra mayor fortaleza, hemos sido muy activos en iniciativas
que desarrollan la relación con los mismos. La vinculación ha sido un
componente fundamental en el diseño de productos con el fin de premiar la
fidelidad y potenciar relaciones amplias y duraderas con los clientes, al
tiempo que se da respuesta a sus demandas actuales en las mejores condiciones
del mercado.”
En el mismo informe de 2009, al hablar de
productos novedosos se dice: “Por último,
destaca la emisión de Participaciones Preferentes Caja Madrid
por importe de 3.000 millones de euros, que tuvo una gran acogida entre
los inversores, especialmente
de los clientes de Banca Personal.”… … … “El asesoramiento de inversiones se
personaliza
en función del perfil de riesgo y el horizonte temporal marcado
por el inversor, utilizando como
herramienta de apoyo el Asesor Personal, un instrumento de gestión de carteras
que mejora la operativa, agilizando la contratación de propuestas de inversión,
con un notable ahorro de tiempo para el gestor comercial y una mejora
sustancial de la eficiencia.”
Finaliza Miguel Blesa su carta de
presentación del Informe 2009 diciendo: “En definitiva, hemos terminado el año
con un balance fortalecido, equilibrado y con provisiones reforzadas que
permitirán hacer frente a un futuro con grandes desafíos pero del que saldremos
robustecidos.”
Dejo a juicio del lector la
interpretación de estos “hechos y
acontecimientos relevantes” contenidos en los Informes Anuales a los que me
he referido.
En esos años formaban parte del Consejo
de Administración de Caja de Madrid, de la Comisión de Control y del Comité de
Dirección, no más de 35/45 personajes de la más diversa procedencia (Partidos
Políticos, Sindicatos, Organizaciones Empresariales, Ayuntamientos y Comunidad de
Madrid). Estos directivos (perdón por el calificativo) que suscribían, con su
asentimiento o con su silencio tales afirmaciones, hoy no recuerdan nada. Eso
de la “Memoria”, no va con ellos. No se acuerdan tampoco de las escandalosas
cantidades embolsadas por una nefasta gestión, a todas luces interesada y
engañosa. Menos aún se van a acordar de resarcir a la Sociedad el daño causado;
ni siquiera de pedir perdón y reconocer su falta de ética y profesionalidad.