domingo, 8 de abril de 2012

LE PÉTIT NAPOLÉON


         Anda estos días el Sr. Sarkozy un tanto desquiciado. Evidentemente está muy preocupado, como cualquier político, en que hay que cuidar la viña (la suya), que se le acaba el chollo. ¡Anda que si en la primera vuelta de las elecciones francesas le dan boleta¡. ¡Con lo majo que se cree él y lo que luce con su Carla!.

Alto no será, pero cabrón (salaud como le dirían en su país), lo es un rato. ¿Por qué este imbécil tiene que aludir a la situación económica española para acojonar a sus votantes, y de paso, jodernos un poco más a los vecinos del sur?. No hace falta que le pétit Napoléon nos dijera que Zapatero era un inútil, como lo es Rajoy y como lo es él mismo: ya lo sabíamos nosotros. Y también lo saben muchos franceses. También los amigos franceses, igual que muchos otros europeos, sabemos que la pandilla de políticos que están ahora mismo en el ajo, no son más que unos peones de los grandes grupos financieros. ¿O todavía alguien piensa que frau Merkel no está al servicio de la gran banca alemana y que las medidas que está imponiendo a Rajoy, y antes a griegos y portugueses, no tienen nada que ver con la banca alemana, primera prestamista de los bancos españoles? ¿No será  que le pétit Napoléon tendrá algún interés oculto en que los terroristas financieros, sí, los que juegan a diario con esa prima tonta: la prima de riesgo, saquen provecho de sus manifestaciones y le pasen bajo mano una comisión de vocero cualificado?.

Sr. Sarkozy: ¡Cállese de una puñetera vez y métase en sus cosas, que tiene suficiente material interno como para trabajar a tope!.

Y aquí, mientras tanto, los peones políticos del terrorismo financiero callados como muertos.

3 comentarios:

Fernando Solera dijo...

Es una cortina de humo para desviar la atención, Armando.

Francia: la bomba de relojería de la Eurozona

No dice ná y lo dice tó ;-)

Un abrazo

emilio dijo...

Qué se puede esperar de alguien que practica la política como un chulo de barrio?
Si se quita la ryaban, el salaud se queda en la mitad.
Y si carla le diera la espalda, la otra mitad.
Un abrazo: emilio

Domingo dijo...

Lo de Sarkozy es todo postureo, como buen macarra que es. Otro que se va a ir por la puerta de atrás de la Historia.